"Fue una infancia feliz; puede decirse que crecí en medio de una función sin fin. Mi padre me leía los grandes monólogos en los largos trayectos en carromato de un pueblo a otro. Los recitaba de memoria, y su voz se oía desde más de medio kilómetro de distancia. Recuerdo que yo leía a medida que él recitaba, y que intervenía interpretando los papeles secundarios. Mi padre me animaba a atreverme con pasajes especialmente buenos, y así fue como aprendí a amar las buenas palabras. " Patrick Rothfuss: El nombre del viento.
Pois aí estou, lendo as aventuras de Kvothe, que se pronuncia "cuouz"... acabo de empezar, vou na páxina 150 e tárdame o momento de coller o libro... e cústame pechalo para facer algunha outra cousa...
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